Desde la década de los noventas, los estados miembros de las naciones unidas han venido realizando encuentros relacionados a temas sociales y ambientales. A partir de la conferencia Rio+20 (Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible), celebrada en Río de Janeiro en Junio de 2012, se gestó un proceso para fomentar la adopción de un nuevo cuerpo de Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que permitan continuar con el impulso generado por los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM) y disponer de un marco global de desarrollo posterior al 2015, año en que los ODM culminaban.
En miras de tener una nueva agenda de desarrollo centrado en las personas, se procedió a realizar una consulta global con organizaciones de la sociedad civil, ciudadanos, científicos, académicos y representantes del sector privado de todo el mundo para que fueran partícipes y protagonistas del proceso de elaboración de la nueva agenda. El Salvador fue uno de los 50 países en los que se realizaron las consultas y localización de la Agenda Post 2015
Tras un largo camino, en julio de 2014, el Grupo de Trabajo Abierto de la Asamblea General (GTA) propuso un documento con 17 objetivos para su aprobación por la Asamblea General de septiembre de 2015. Sobre ese documento se iniciaron las futuras negociaciones y aprobación de los nuevos ODS y la agenda global de desarrollo para el periodo 2015-2030.
Finalmente, el 25 de septiembre de 2015, en el marco de la 70 edición de la Asamblea General de Naciones Unidas, en Nueva York, los 193 países de las Naciones Unidas, adoptaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, el documento marco que regirá las actividades para el bienestar de las personas y el cuidado del planeta por los próximos 15 años.